Redes Sociales Parte 1- Probablemente ya conoces a tu próximo cliente.

Un estereotipo de nuestra industria publicitaria es que nunca sabemos de dónde o cuándo lograremos nuestro próximo proyecto, o para quién lo haremos. Para la mayoría de nosotros, este estereotipo es cierto, parcialmente.

Lo raro es que tu próximo cliente esté escondido por ahí entre tus contactos de Twitter, Facebook o cualquier otra red social o amigos. Cada vez más, cuando preguntamos a locutores dónde encuentran a sus clientes nos dan las mismas dos respuestas: a través de referencias y clientes anteriores. Eso no me sorprende porque así mismo es como obtengo a muchos de mis clientes.

En este post trataremos de darte algunos tips para que puedas provocar a algunos de tus clientes futuros, personas a las que ya conoces, a que hagan negocios contigo. La mayoría de estos tips son sencillos y fáciles de implementar, quizás ya has intentado uno o varios de éstos, de todas maneras acá te los paso como una lista de sugerencias:

1. Asegúrate que tu Bio en el perfil de la red social que utilices diga tu profesión. Cada vez que veo un comentario de alguien cuyo nombre no puedo reconocer siempre hago click para ver el perfil. Es increíble la cantidad de perfiles que no dicen nada o dicen muy poco. Por ejemplo, un perfil que dice “me gusta la música, el chocolate y los dibujos animados” no me dice nada. En cambio “diseñador web que gusta de la música, el chocolate y los dibujos animados” mantiene el elemento de diversión pero me dice que esa persona es un diseñador web.

2. En la medida de lo posible trata de que tu perfil en la red social permita a las personas conocer más sobre ti (por ejemplo, un link a tu página web). No funciona que sepan que eres un escritor, locutor, productor, etc. si no pueden seguirte y ver tu portafolio o tu página web.

3. Cuando actualices tu status, ocasionalmente incluye un comentario sobre lo que estás haciendo actualmente. No todo el mundo hará click para ver tu perfil, por ello, es que es importante dejarles saber de vez en cuando a tus contactos lo que haces. Decir en tu status que tienes hambre o necesitas un café sólo te traerá risas de empatía de algunos contactos, pero decir que te sientes muy bien con el diseño web que estás terminando hoy le recordará a tus contactos que a eso te dedicas. OJO: respetando siempre la confidencialidad del proyecto en cuestión.

4. Presta atención a lo que dicen otros en las redes sociales. Es importante! He logrado proyectos simplemente porque alguna de las personas a las que sigo publican en su Twitter que necesitan un locutor, y puedes pensar que sólo se trata de estar en el lugar correcto en el momento correcto, pero he visto más de una vez status y personas que postean proyectos en redes sociales (si estás siguiendo a las personas adecuadas).

5. Mantén una lista actualizada de tus clientes pasados y recientes. Haz el esfuerzo extra de mantener algún contacto con ellos a través del tiempo sin llegar a acosarlos. A la mayoría de los clientes no les molestará que les des seguimiento ocasionalmente.

6. Haz ofertas por tiempo limitado. Si las cosas están un poco lentas para ti, por qué no hacer lo que hacen las grandes empresas? Prepara una oferta. Postear un descuento en tus servicios en el status de tu cuenta en la red social podría ser justo el caramelito lo que alguien necesita para contratarte. A todo el mundo le gustan las ofertas, y eso incluye a tus clientes potenciales.

Estos consejos son sencillos pero deben ser llevados a cabo con mucho cuidado. No exageres!

POR QUÉ NO DEBES EXAGERAR.

Bien, entonces estas sugerencias de la sección anterior son tan fáciles que piensas que las puedes hacer todas varias veces al día y de esta manera tu carga de trabajo aumentará, cierto? Pues NO!

Estos consejos son simples pero si exageras con los puntos 3,4,5 y 6, podrías ser considerado como spammer (que envía correos sucios) o como alguien que no tiene nada más que hacer.

LAS RELACIONES CUENTAN.

Recuerda, la raíz de cada proyecto es una relación con el cliente. La raíz de la relación con el cliente es la confianza.

Ninguno de estos consejos te servirá si tus relaciones con tus clientes y los contactos de las redes sociales están dañados o son débiles. Esta es una razón para desarrollar una buena reputación en línea (online).

Alcanzar el éxito: una resolución para todos!

En uno de nuestros últimos comentarios del 2010, llamaba a la reflexión sobre las resoluciones para este nuevo año. Me atrevería a asegurar que prácticamente todos hemos incluido el éxito como una resolución de vida para este 2011 que recién inicia.

Pero, ¿qué es en realidad ser exitoso?

Luego de escuchar una interesante entrevista que le hiciera CNN a la actriz mexicana Adriana Barraza, nominada en el 2006 al Oscar por su papel en la película Babel, una actriz que se hizo famosa después de cumplir los cincuenta años de edad, y es interesante ver cómo el concepto de éxito varía de persona a persona.

Llama mucho la atención cuando ella responde que considera que siempre fue exitosa, mucho antes de hacerse famosa. La pregunta obligada del entrevistador la lleva a revelar que después de muchos años de arduo trabajo, caídas y pequeños logros profesionales buscando el éxito, cayó en cuenta de que, en el camino, fue cuidadosa con otros aspectos de su vida y por tanto considera que siempre fue exitosa como madre, que es una exitosa esposa y que ha sido exitosa como amiga.

El balance personal-profesional hace que muchas personas, como Adriana, desde ya se sientan orgullosas de sus logros, y si tomamos en cuenta que el éxito y la fama a veces te pueden aislar más que “acompañar” entonces tiene mucho sentido que esta veterana de la vida y de la actuación nos brinde un poco de luz sobre la subjetividad que envuelve al éxito vs. la innegable realidad y objetividad que es la familia y los amigos.

Con estas líneas les dejo el siguiente pensamiento: el éxito en la vida profesional alimenta el ego pero el éxito en la vida personal alimenta el alma, ¿podemos lograr un balance? yo creo que sí.

Un tono de FAMILIARIDAD.

Hace unos días una joven grababa un demo y yo trataba de explicarle un poco cómo interpretar el script. Hice todas las sugerencias clásicas como “léelo como si estuvieras hablando con tu mejor amigo” o “imagina que estás hablando solo para una persona” y al final, después de muchos intentos logramos "armar" una toma más o menos como la habíamos buscado. Luego más tarde, caí en la cuenta! ¡No todos hablamos con familiaridad en nuestro día a día! Por lo tanto, si no estás familiarizado con esta forma de comunicarte, pues no sabes de qué te están hablando si ésa es la indicación que te están dando.

Cuando hacemos locuciones comerciales es muy común que te soliciten ese tono de “familiaridad”, que en la práctica es hablarle a la gente como si la conocieras de toda la vida. Esto se aprende practicando y, de ser posible, hacerlo en nuestra cotidianidad, día a día. Al contestar el teléfono, al saludar personas en la calle, no importa lo que debamos decir ni a quién debamos decírselo, sólo hablemos como lo haríamos con un hermano, un tío, un buen amigo.

¡Este es un elemento clave para mejorar nuestra locución comercial! Después de todo, las palabras correctas dichas correctamente hacen la diferencia. Por supuesto debemos leer apropiadamente el texto en cada grabación, pero si también logras dar ese tono de familiaridad, te irá mucho mejor en el mundo de la locución comercial.

¡A tu salud profesional!

Película recomendada: The King´s Speech (El Discurso del Rey).

Por lo general no acostumbramos a recomendar películas, pero en este caso, se hace necesario darles por lo menos un empujoncito para que traten de ver “The King´s Speech” que protagoniza el actor Colin Firth.

El tema de la película nos concierne e interesa de manera especial pues se trata de la historia del Rey Jorge VI, un hombre callado a quien no le interesa ser Rey pero se ve en la difícil situación de aceptar el trono de Inglaterra debido a que su hermano había abdicado al trono para casarse por amor con la plebeya divorciada norteamericana Wallis Simpson.

Básicamente, la historia ya es conocida, pero en este caso el tema central de la película es el enorme miedo escénico de este nuevo Rey que no puede hablar apropiadamente en público pues ni siquiera logra comunicarse efectivamente con sus propios allegados. La segunda guerra mundial se avecina y la familia real inglesa se ve en la urgente necesidad de los servicios de un terapeuta del habla para lograr que el Rey pudiera enfrentar este gran reto: su miedo escénico y su tendencia a tartamudear y así lograr dirigirse finalmente a su pueblo, mover las masas y liderar al país a través de esos vientos de guerra.

Millones de personas alrededor del mundo sufren de esta molesta condición y la película la trata con mucho respecto, pero también muestra la importancia de la comunicación, el qué decimos y cómo lo decimos.

Así como el discurso del Rey finalmente impactó a su pueblo, nosotros los locutores tenemos la habilidad de influir en otras personas cada vez que nos encontramos frente al micrófono.

Podremos ver en la película muchas de las técnicas que precisamente son recomendadas en el proceso de coaching y talleres relacionados con la locución y la oratoria. De seguro que todos acá podremos encontrar momentos en la película con los cuales nos sentiremos muy identificados.

Una excelente excusa para ir al cine!