La verdad es que este último artículo ha resultado un tanto difícil, y es que cuando hablamos de redes sociales hay tanto material relevante que no es sencillo descartar, así que hemos decidido que este último artículo sea como un breve paseo a través de las diferentes redes sociales, las más populares por supuesto, que cada día surge una nueva idea de una red social.
Hace poco leí que un colega está pensando en asegurar desde ya “domain names” con el nombre de sus hijos, adelantándose a los acontecimientos de los próximos diez a quince años. me pareció un poco exagerado pero su pensamiento detrás de esta idea es que esto, la red, será parte fundamental de la vida de sus hijos tanto si son empleados, emprendedores o como simples individuos, en un futuro no muy lejano. Y creo que tiene razón, ahora que lo reflexiono mejor.
La red social se convertirá inevitablemente en la marca personal de todos nosotros en la red, lo que sucede desde ya con los que utilizamos Facebook, Twitter, Linked In, etc. solo que tal vez no habíamos reparado mucho en ello.
Así que, algunas sugerencias en este caso, para nosotros y nuestra transición a una vida cada vez mas virtual, podrían ser:
1. Tener más exposición. Tener nuestros dominios en la red y perfiles en las diferentes redes sociales. Si queremos sobresalir de la masa tendremos que exponernos más, seamos precavidos con las informaciones personales, pero seamos arriesgados y permitamos que nos conozcan un poco más, sobre todo, como profesionales, a fin de hacer que las redes sociales en cierta forma trabajen para nosotros.
2. Manejar efectivamente los sistemas de redes sociales. Conozcamos mejor cómo funcionan y así podremos aprovecharlas al máximo. Linked In acepta hasta tres direcciones web, y también puedes agregar las entradas de tu Twitter y Blog a tu home page. Con Twitter ya sabes que puedes seguir a personas de tu industria pero también puedes enlazar tu página en Twitter a tu blog o página web, y con herramientas como TweetDeck disponibles, puedes monitorear los diferentes grupos.
3. Sé interesante. La mayoría de nosotros somos interesantes, a nuestro modo, dejemos que otros nos conozcan así. A veces somos tímidos en una reunión social pero muy creativos en nuestro propio entorno. Inventa, sé creativo, haz videos de tus ideas y ponlas en la red. Piensa como un publicista y preséntate de maneras que hasta ahora no conocemos.
4. Sé diferente. Nadie se detiene a ver más de lo mismo pero las curiosidades, lo que es diferente, sobresale y llama la atención.
5. Sé tú mismo. Deja que brille tu personalidad, tu autenticidad.
Ahora bien, hay varias consideraciones para tomar en cuenta para nuestra futura vida virtual, por ejemplo tomemos a Facebook, muchas personas usan a FB como su página o blog personal, pero:
1. Tu página en Facebook es propiedad de ellos, no tuya.
2. Ten presente que FB no es para siempre, las redes seguirán evolucionando, otras llegarán.
3. En FB es muy difícil hacer backups o mantener tus contenidos para usos futuros.
4. FB siempre se mantendrá cambiando su imagen, sus features, diseños, detalles, etc. sin tu consentimiento, y no puedes hacer nada al respecto.
5. No puedes optimizar tu página de Facebook para que aparezca en los motores de búsqueda.
6. Con FB siempre estarás a merced de lo que ellos te permitan o no editar, publicar o personalizar.
Veamos el caso de Twitter, hay estadísticas que más o menos nos dan una idea de qué criterios definen a una persona “con influencia” en Twitter, esto a la vista de los seguidores.
De 1498 votos:
- El 24% piensa que el contenido de los tweets es lo más importante.
- Un 17.5% opina que quien logra que otros tomen acción a través de sus Tweets (apoyo, protesta, uniones, etc.) goza de una definitiva alta influencia.
- Un 17.2% considera que quien envía tweets con un alto índice de re-tweets tiene buena influencia en esa red (muchos de esos re-tweets están ligados a tomar acciones también).
- Finalmente, un 15% opina que la calidad de las personas que siguen tus tweets es lo que realmente te convierte en una persona con influencia.
Increíblemente, criterios como que las personas sean famosas o ricas, o que sean páginas populares, o que sean personas que envían muchos tweets cada semana, no son vistos como personas con influencia en esta red, solo personas meramente activas en ella.
Linked In, por su lado, es definitivamente la herramienta en línea para hacer contactos de negocios y profesionales por excelencia, pero tiene una limitación, o mejor dicho, es más selectiva, pues debemos conocer a las personas con perfiles allí para lograr conectar con ellas, o buscar que nos introduzca un conocido en común, o bien solicitar la conexión directamente a esa persona desconocida pero que nos interesa conectar y quedarnos a merced de que ésta nos acepte en su red.
Por su naturaleza particular, Youtube es un medio social sin mucha competencia por ahora, muy buena para conectar ampliamente con la gente, ideal para dar a conocer nuevos trabajos, producciones, ideas o compartir pura diversión.
Bien, dicho todo esto, vemos que ciertamente las redes sociales formarán parte integral de nuestro futuro y el de nuestros hijos. Nuestra vida social personal y de negocios necesitará de las redes sociales de manera que aún no sospechamos.
La tendencia es: cada vez menos tiempo para socializar pero aún así la necesidad imperiosa de hacerlo.
Las herramientas en línea existen, cada una sirve a propósitos específicos y como herramientas que son, no pueden hacerte daño…a menos que tú las programes para ello.
Muchas nuevas herramientas se crearán en los próximos años, niños genios ya empiezan a imaginar ideas revolucionarias en algún lugar del mundo y tendremos que adaptarnos.
Creo que lo importante es formar parte de la tendencia con un nivel más alto de conciencia de todo lo que esto implica, bueno y malo. De manera que el llamado obligado es a ser más prudentes en nuestra vida cotidiana y llevar esa prudencia también a nuestra vida virtual.
Recuerda el viejo dicho aplicado a este nuevo entorno:
“eres dueño de lo que callas y esclavo de lo que… posteas! J
A tu salud profesional.
